Homínido fósil hallada en el desierto del Djourab por un equipo franco-tchadiense. El único espécimen, apodado Toumaï, se ha datado en 6 a 7 millones de años de antigüedad.
Se cree que vivió en zonas pantanosas. Su cráneo es simiesco, aunque de rostro breve y dientes pequeños, en particular los colmillos, lo cual le acerca a los humanos. Se han encontrado un cráneo, dos fragmentos de mandíbula inferior y tres dientes aislados. Tiene un prominente toro supraorbital y una cresta sagital en la parte posterior del cráneo, y su volumen cerebral es de 350 cc. Tiene rostro alto y poco prognato, caninos relativamente pequeños, y ausencia de espacio entre los dientes. Podría ser el antecesor del Ardipithecus ramidus.
Michel Brunet, el descubridor de Toumai, opina que pertenece a la rama de los hominina, muy cerca del antepasado común con el chimpancé, pero en la línea hacia los humanos: "de los caracteres derivados que se encuentren en la dentadura de Toumai, se deduce que forma parte de la rama humana". Si éste es el caso, sería un homínido fósil encontrado al oeste del Rift (en pleno “territorio Chimpancé”). Pero otros piensan que Toumai se sitúa en la rama que lleva al chimpancé.